Si alguna vez has tenido un mal día y un perro ha venido a hacerte compañía, sabes de lo que hablamos. Ese movimiento de cola, esa mirada incondicional y ese amor sin preguntas tienen un poder especial. Ahora imagina eso en un hospital, en un momento complicado, cuando más apoyo se necesita. Pues eso es justo lo que está ocurriendo en el Hospital Clínico Universitario Virgen de la Victoria de Málaga, donde han lanzado un programa de terapia asistida con perros en su unidad de Cuidados Paliativos. Y los resultados están siendo increíbles.
¿Cómo funciona la terapia con perros en hospitales?
Gracias a la colaboración con Perruneando Málaga, un equipo de profesionales de la salud—terapeutas, psicólogos, logopedas—y sus compañeros de cuatro patas están visitando pacientes para ofrecer algo más que tratamiento médico: compañía, conexión y, sobre todo, un alivio emocional en momentos difíciles.
Los perros, entrenados especialmente para este tipo de intervenciones, ayudan a reducir el estrés, mejorar el estado de ánimo y hasta disminuir la sensación de dolor. Y lo mejor de todo: no tienen efectos secundarios.
El impacto emocional de un perro en Cuidados Paliativos
Si hay un momento en el que la conexión emocional es clave, es en Cuidados Paliativos. Muchas veces, los pacientes en esta situación sienten ansiedad, tristeza o simplemente necesitan algo que les haga sentir mejor, aunque sea por un rato.
Aquí es donde entran los perros, que con solo su presencia generan un cambio en el ambiente. Los pacientes sonríen más, los familiares se relajan y el personal sanitario ve cómo los beneficios van mucho más allá de lo emocional: mejora la comunicación, hay más interacción y, en definitiva, se crea un espacio más humano dentro del hospital.
El poder de los perros como terapia
Este tipo de iniciativas refuerzan algo que en Margarita Morada sabemos muy bien: los perros tienen un impacto enorme en la salud y el bienestar de las personas. Ya sea en hospitales, en centros educativos o en sesiones individuales, las terapias asistidas con animales tienen una capacidad única de transformar momentos difíciles en instantes de alivio y conexión.
Lo que está ocurriendo en Málaga es un recordatorio de que la medicina no siempre viene en forma de pastillas o tratamientos, a veces viene con cuatro patas y una nariz húmeda que te da un empujón de ánimo cuando más lo necesitas.
Si alguna vez te has preguntado cómo un perro puede cambiar vidas, este es un ejemplo claro. Y si quieres conocer más sobre cómo la terapia asistida con perros puede ayudar en diferentes contextos, en Margarita Morada seguimos trabajando para acercar este tipo de acompañamiento a quienes más lo necesitan.